Los
primeros monjes aparecieron en España en el siglo IV. Eran anacoretas que
vivían en la soledad del yermo y cenobitas que convivían en los monasterios.
Todos buscaban a Dios en el apartamiento del mundo.
Junto a los monjes,
también empezó a aparecer la institución de las vírgenes consagradas y pronto
los monasterios femeninos llegaron a ser muy numerosos.
El monasterio de San Pedro es uno de los cenobios femeninos más antiguos del reino de León. Su
situación geográfica, no lejos de la antigua calzada romana, convertida más
tarde en el camino francés o de los peregrinos a Compostela, y sus relaciones
jurídicas y espirituales con la abadía de Sahagún, hicieron de él un centro de capital importancia en la Edad Media , al haber
sido favorecido por reyes, infantas y magnates en razón de la estrecha relación
familiar con sus abadesas y monjas. Se yergue junto al pueblo
que lleva el mismo nombre del cenobio y se localizan en la Comunidad Autónoma
de Castilla-León. Más concretamente en la conocida Tierra de Campos y en la
comarca denominada Ceana. Desde Valladolid (situada a 104 km), el acceso al
lugar resulta cómodo a través de la Nacional-601 (Madrid/Gijón), que al llegar hasta
Mayorga de Campos se debe abandonar por una carretera comarcal, la cual conduce
a Sahelices, Monasterio de la
Vega , Melgar de Abajo, Melgar de Arriba, Galleguillos y,
finalmente, a San Pedro de las Dueñas, 28 km más allá. Desde León (a 77 km de
distancia), el acceso se realiza igualmente por medio de la Nacional-601
dirección Sur, aunque al llegar a Matallana se debe cambiar por la Nacional-120
(dirección de Sahagún) y después, de nuevo, por la Comarcal que conduce a
San Pedro, 4 kilómetros al sur de esta villa. Otra alternativa es la vía férrea
Madrid-Asturias/Galicia. La estación más próxima es Sahagún, desde donde se
puede seguir de nuevo la carretera comarcal antes mencionada, mientras se
bordean siempre las orillas del Cea con sus cortinas de chopos. Parece del todo evidente que la
fundación hay que situarla entre 973 y 976, de acuerdo con lo expuesto por
Escalona y según consta en documentos del archivo monástico. Cierto que son de
autenticidad dudosa, supuesto que podrían haber sido interpolados cuando las
monjas en el siglo XIII intentaron apartarse de la jurisdicción del abad de
Sahagún. Vienen a decir que el 20 de diciembre de 973 doña Salomona vendió a
Ansur e Idoara la llamada Villa de Pedro, situada entre los ríos Cea y Araduey
y edificó en la población un monasterio de pequeñas dimensiones y de
carácter familiar, cuya iglesia se dedicó a San Pedro, el cual en 976 pasó a
depender de facto de la abadía de Sahagún. Así, al menos, quedó recogido en la
confirmación del testamento de Ansur, llevada a cabo el 11 de mayo de 976.
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